En esta nueva entrada del blog de Proplac, especialistas en sistemas constructivos y edificación de última generación, decoración con Pladur y techos tensados y distribuidor oficial de Barrisol, queremos tratar un tema que preocupa a muchas familias de nuestro país: cómo lograr una correcta insonorización de nuestra vivienda.
El ruido puede interferir en el sueño, el descanso, la conversación y nuestro día a día. Esa fatiga continuada causa, a corto y medio plazo, irritabilidad, dolores de cabeza e incluso estrés. Las encuestas ponen en evidencia que el ruido es un problema ambiental importante para un elevado número de familias españolas.
Todo lo que necesitamos para contener y reducir el ruido es protegernos de las fuentes de sonido que alteran nuestra vida cotidiana, con el fin de disfrutar de una existencia saludable. El diseño de la vivienda y, especialmente el tipo de los materiales empleados pueden reducir el impacto del ruido en nuestras vidas y mejorar la calidad de nuestro hábitat familiar.
En este sentido, destacan los productos que consiguen una absorción acústica inmejorable, como las placas de yeso laminadas, de manera que el aislamiento acústico con Pladur se presenta como una solución altamente eficaz.
El ruido del vecindario
Entre las fuentes comunes de ruido de nuestros barrios se incluyen un elevado número de elementos: carretera, ferrocarril (e incluso el tráfico aéreo si vivimos cerca de un aeródromo), aparatos de calefacción y unidades de refrigeración, bombas de la piscina, televisores y equipos de sonido, alarmas de automóviles y casas, todo tipo de electrodomésticos, perros y otros animales.
Asimismo, es altamente molesto -especialmente para los bebés, niños pequeños, personas mayores o convalecientes por sufrir algún tipo de patología- el ruido procedente de naves industriales y talleres, la música y el sonido originado por los clientes de locales comerciales y terrazas, obras de mantenimiento y reformas en edificios, etc.
El ruido se mide por el nivel de presión sonora, que se expresa como una relación de potencia y calibrado en decibelios (dB). El oído tiene un amplio rango dinámico para la percepción del audio, que incluye desde los sonidos más suaves a los niveles que se consideran peligrosos y que, incluso, son capaces de causar daños permanentes en el oído y sordera.
Como ya hemos puesto de manifiesto en anteriores entradas del blog de Proplac, existe una tabla que relaciona los decibelios con el tipo de sonido y su percepción. Hay que tener en cuenta que no es una escala lineal. Así, al pasar de 50 dB a 100 dB no es dos veces más fuerte, sino 16 veces más alta, y de 60 dB a 30 dB no es la mitad de fuerte, sino un octavo menos fuerte.
La exposición regular durante más de un minuto de tiempo a 110 dB supone correr el riesgo de pérdida de audición permanente y la exposición prolongada a cualquier ruido igual o superior a 85 dB puede causar la pérdida gradual de la audición.
En cualquier caso, no es necesario alcanzar extremos tan altos para que el ruido represente un verdadero problema en nuestras vidas, un malestar que se torna en algo mucho más grave cuando afecta a nuestro entorno doméstico, el lugar donde pasamos la mayor parte del día junto a nuestras familias.
Por esta razón, es esencial prestar atención a la insonorización de viviendas y dejarse asesorar por empresas especializadas en el sector. El equipo de profesionales de Proplac, distribuidor autorizado oficial de Barrisol en las provincias de Murcia y Alicante, estudiará su caso y le recomendará la mejor solución para la insonorización de su casa.